jueves, 19 de junio de 2014

Programa Nacional de Inmunizaciones

¿Sabía usted que desde 1978 que nuestro país cuenta con un Programa Ampliado de Inmunizaciones cuyo fin es prevenir morbilidad, discapacidad y muertes debido a enfermedades inmunoprevenibles?

Dentro los éxitos de este programa destacan la erradicación de la Viruela (1950), de la Poliomelitis (1975) y del Sarampión (1992).

Se preguntará entonces, ¿qué enfermedades se están previniendo mediante las vacunas?
Actualmente el calendario de vacunación incluye:
  • Tuberculosis, 
  • Difteria, Tos convulsiva, Haemofilus Influenza B, Hepatitis B
  • Poliomielitis, 
  • Sarampión, Rubeola, Paperas
  • Enfermedades por neumococo
  • Enfermedad meningocócica
  • Infecciones por Virus del Papiloma Humano
  • Tétanos, 
  • Rabia, Influenza
Es importante recordar que debe mantener el calendario de vacunas en su hijo al día (con sus dosis en las fechas correspondientes), pues son los niños quienes siempre están más propensos a las enfermedades y sus complicaciones, las que mediante este programa se pueden prevenir.


Fuente: Ministerio de Salud de Chile (2014) Programa Nacional de Inmunizaciones. Obtenido desde: http://web.minsal.cl/PROGRAMA_NACIONAL_DE_INMUNIZACIONES Consultado el 23 de abril de 2014.

Infección por Rotavirus

¿Qué es el rotavirus? 
Es el virus que más frecuentemente produce diarrea en los niños, en forma más grave en menores de 2 años. La repetición de la infección es común y los niños mayores y los adultos también pueden contagiarse. 

¿Cómo contraen los niños esta infección? 
El rotavirus es un virus muy contagioso, se encuentra en grandes cantidades en las deposiciones de las personas infectadas.

Se contrae tocando a personas infectadas (sin usar medidas de higiene adecuadas) o tocando objetos que han estado en contacto con las heces de estas personas y después llevarse la mano a la boca. 

Esta clase de contagio infeccioso se conoce como “transmisión fecal-oral.” O ano-mano-boca.

¿Cuáles son los síntomas más frecuentes? 
La infección comienza con fiebre (T° > 38° axilar) y/o vómitos por 24 a 48 horas. Luego aparece diarrea acuosa muy frecuente (hasta más de 10 episodios diarios). En el niño usted podrá observar que está decaído e irritable al estímulo.

¿Durante cuánto tiempo puede el niño contagiar? 
En general el niño puede eliminar el virus por las deposiciones hasta que ceden los síntomas. (7-10 días desde el comienzo del cuadro.)

¿Cuáles son sus complicaciones? 
La más frecuente y grave es la deshidratación, debido a los vómitos frecuentes, la diarrea líquida abundante y la fiebre.

¿Qué debo hacer para evitar complicaciones? 
Para evitar la deshidratación debe dar líquidos desde las primeras horas, en forma fraccionada o en sorbos (para evitar los vómitos). 
Puede darle por cucharadas pequeñas cada 5 minutos y si lo tolera bien, dar un poco más.

Es recomendable aportar 100 cc aproximadamente de sales de rehidratación oral u otros líquidos (Infusiones de canela, manzanilla o agua de arroz, agua mineral sin gas, todas ellas con una cucharadita de azúcar máximo por taza), después de cada deposición alterada (lentamente o de a cucharadas).

¿Cómo reconocer las complicaciones? 
Los signos de deshidratación en los niños pueden ser: boca seca, ojos hundidos, llanto sin lágrimas, sed y disminución de orina (ausencia de orina por más de cuatro a seis horas).

Otros síntomas son: irritabilidad, rechazo a la comida y un decaimiento importante o excesiva tranquilidad, que pueden ser señales de un compromiso mayor.

Si un niño vomita más de 4 veces en una hora, es muy difícil poder reponer sus pérdidas mediante la rehidratación oral, por lo que debe consultar a médico prontamente.

¿Cuál es el tratamiento? 
No existe un tratamiento específico para el virus sólo el aporte de líquidos para evitar o tratar la deshidratación. Los niños que usan pañal necesitarán cuidados adicionales para proteger la piel de la dermatitis del pañal (“coceduras”) por las frecuentes deposiciones. 
Si el niño se deshidrata, podría ser necesario internarlo en el hospital para que reciba suero de rehidratación.

¿Y qué hago con la alimentación?
La alimentación también debe entregarse en forma fraccionada hasta que cedan los vómitos.
Respecto a la lactancia, si está con pecho materno exclusivo puede mantenerlo de igual forma. Si no lo está, dar leche usual según tolerancia.

En las comidas puede servirle arroz o fideos cocidos, pollo sin cuero o posta cocida y molida, zanahoria cocida como única verdura, sal y un poco de aceite crudo.
Para los postres sólo se recomienda la manzana rallada o el plátano maduro molido sin semillas.

Debe evitar verduras (excepto zanahoria), leguminosas secas, pan blanco e integral, frutas (excepto manzana y plátano), carne, pescado frito, queso, leche distinta de la indicada, huevo, mantequilla, mermelada, condimentos, bebidas gaseosas y jugos de fruta.

Cuando sus deposiciones estén normales, puede volver a la cantidad de leche habitual, aumentando el volumen o concentración de a poco en dos a tres días.
Las verduras también se deben incorporar de a poco, por ejemplo papa el primer día, zapallo el segundo y las verduras verdes al tercero. Introducir la fruta habitual también en varios días.

¿Qué puedo hacer para prevenir el contagio? 
Lo más importante para prevenir que la infección del rotavirus se propague es lavarse muy bien las manos con agua y jabón (por lo menos por 15 segundos). 
El lavado de manos antes de tocar alimentos y especialmente después de mudar a un niño, puede disminuir el contagio. 

Tener especial cuidado al eliminar los pañales (recubiertos y bien cerrados en bolsas).

También puede ayudar el lavar con agua y jabón los juguetes y las superficies de la casa.

El que un niño se contagie con rotavirus no asegura que no vuelva a sufrirla a futuro, por lo cual siempre es bueno el prevenir adecuadamente en el hogar.

Referencias:
Pontificia Universidad Católica de Chile. (s.f.) Rotavirus. Obtenido desde: http://redsalud.uc.cl/ucchristus/VidaSaludable/Glosario/R/rotavirus.act Consultado el 21 de abril de 2014.
Emilfork M. (s.f.) Educación al paciente. Diarrea Aguda. Clínica Santa María. Obtenido desde: http://www.clinicasantamaria.cl/edu_paciente/diarrea.htm Consultado el 21 de abril de 2014.

Prevengamos las enfermedades respiratorias en los niños.

¿Qué causa las enfermedades respiratorias en los niños?

Durante la época de invierno, el frío hace que los mecanismos de defensa de la nariz y boca estén más vulnerables, lo que favorece las infecciones respiratorias.

Estas infecciones son causadas principalmente por virus y bacterias, siendo las más frecuentes: los virus influenza, parainfuenza, rinovirus, virus respiratorio sincicial y adenovirus.

Gran parte es más común en otoño e invierno, aunque hay casos que se extienden a primavera como el coronavirus y el virus respiratorio sincicial, o verano como el adenovirus. 

La mayoría se propaga en forma de gotas de saliva por el aire, o por el contacto de juguetes o muebles contaminados.


En cuanto a las bacterias encontramos al Coqueluche, frecuente en el invierno, que se propaga por gotitas de saliva en el aire o Mycoplasma común en neumonías de niños mayores.


¿Cómo prevenir las enfermedades respiratorias?
Cinco consejos para el hogar:
No a los resfriados: Evite el contacto de su hijo con personas con síntomas de resfrío, tales como tos, congestión nasal, dolor de garganta, etc. Las infecciones siempre resultan más graves en un niño que en un adulto y son muy fáciles de contagiar. No se recomienda que lo lleve a lugares con mucha gente como malls, tiendas o reciba muchas visitas.
Ambiente adecuado. Mantenga temperado su hogar, ventile a diario evitando cambios bruscos de temperatura o exceso de humedad. 
Evite contaminantes ambientales tales como el humo de tabaco o braseros muy dañinos para la salud del aparato respiratorio. 
Limpie prolijamente cualquier objeto que usted crea que se haya contaminado con las gotitas de saliva, mucosidad, etc. de alguien enfermo, a fin de evitar infecciones en otros integrantes de su familia.
Manos limpias. Una de las medidas más importantes. Siempre lávese las manos antes de atender a su hijo, y si alguien más lo atiende, exíjale que también se lave las manos o que utilice alcohol gel. 
Se recomienda que no se cubra la boca con las manos al estornudar sino con el codo, y que utilice pañuelos desechables y no de tela.

 
Sí a las vacunas. Son una herramienta eficaz en la prevención de complicaciones por enfermedades respiratorias, entre otras. Mantenga a su hijo siempre con el calendario de vacunas al día.
Lactancia materna. Muy efectiva para disminuir el riesgo de contagio, no sólo de enfermedades respiratorias, sino también de gastrointestinales. Si asegura una adecuada nutrición, su hijo podrá responder mejor en caso de enfermarse.

Con estos sencillos pasos puede prevenir el contagio de enfermedades respiratorias en sus hijos.

Referencias:
Strain H., Heather (s.f.) Cómo prevenir y abordar enfermedades respiratorias. Chile Crece Contigo. Obtenido desde:  http://www.crececontigo.gob.cl/adultos/columnas/como-prevenir-y-abordar-enfermedades-respiratorias/ Consultado el 17 de abril de 2014.

Ministerio de Salud Argentina (s.f.) 7 Hábitos para prevenir las infecciones respiratorias. Obtenido desde: http://www.msal.gov.ar/vamosacrecer/index.php?option=com_content&view=article&id=484:7-habitos-para-prevenir-las-infecciones-respiratorias&catid=342:nc-cuidados-de-la-salud-en-invierno&Itemid=292 Consultado el 17 de abril de 2014.

Puede revisar también:

Datos para tomar en cuenta.

En el Subdepartamento de Pediatría durante el año 2013, aproximadamente el 49% de las hospitalizaciones fueron por enfermedades respiratorias.

¿Y del total de pacientes?, el 79% tenía desde 4 años hacia abajo. 

IMPORTANTE ya estamos en invierno, ¡esforcémonos en el hogar día a día para que mediante la prevención este año la salud de nuestros niños sea mejor!


Fuente: Unidad Análisis Registros Clínicos GRD, 2013.